¿Qué significan realmente «no comedogénico», «hipoalergénico» y «sin fragancia»?
Si sueles prestar atención a las etiquetas de los productos para la piel, es posible que estés familiarizado con los términos «no comedogénico», «hipoalergénico» y «sin fragancia». Al fin y al cabo, los dermatólogos llevan años recomendando productos con estos atributos.
Pero, por si acabas de empezar una rutina de cuidados de la piel o aún no sabes qué significan estos términos, te dejamos aquí unas rápidas definiciones:
Para entender este término, respondamos primero a la pregunta ¿qué es un comedón? Los comedones son esencialmente poros obstruidos. Los comedones abiertos con conocidos comúnmente como puntos negros, mientras que los comedones cerrados suelen denominarse puntos blancos o espinillas.
Los productos no comedogénicos suelen recomendarse a personas que tienen la piel grasa o acneica. Para evitar que los poros se obstruyan, estos productos suelen tener una textura más ligera o ingredientes que no aportan grasa.
Sin embargo, es importante saber que, aunque los productos no comedogénicos están dirigidos a las personas con tendencia acneica, es importante seguir una buena rutina específica para tu tipo de piel. Considera la etiqueta «no comedogénico» como una opción útil¹.
Este es otro término común que se encuentra en muchos productos cosméticos y destinados al cuidado de la piel sensible. Una etiqueta «hipoalergénica» determina que ciertos productos han sido formulados para que sean menos propensos a causar reacciones alérgicas.
La etiqueta hipoalergénica puede ser útil para personas con piel sensible o propensas a padecer irritaciones de la piel. Sin embargo, es importante saber que hipoalergénico no significa necesariamente a prueba de alergias². Si tienes tendencia a sufrir alergias, puede ser una buena idea probar primero los nuevos productos con una pequeña cantidad en el antebrazo para ver si se produce una reacción alérgica.
Las personas que tienen alergia a las fragancias o aversión a los olores fuertes deben conocer la diferencia entre los productos sin perfume y los productos sin perfume añadido. Estos términos no son sinónimos.
Según la Agencia de Protección Medioambiental de EE. UU. (EPA), «sin perfume» significa que el producto no presenta olor ya que no se añade ningún componente con esta propiedad³.
En cambio, «sin perfume añadido» significa que no se añade ningún componente para aportar olor. Sin embargo, el producto puede presentarlo debido a la presencia de ingredientes que, sin ser su función principal, pueden proporcionar fragancia³.
Así pues, el hecho de que un producto no tenga un aroma evidente no significa que sea seguro para las personas sensibles a las fragancias³. Si eres una de estas personas, comprueba cuidadosamente la etiqueta.
